Preguntaba mi Madre que por qué un avión se había estrellado en Ucrania, "¿desde cuando están en guerra?", insistía. Parece mentira, y no es que no se acuerde que hace unos meses se mataban, se pegaban tiros por una supuesta libertad, es que ella dice que eso ya se había acabado. Sí, querido lector, sí, lo que no sale en los medios de comunicación no existe. Eso ya lo dije hace tiempo, son los todopoderosos, y ahora pasa lo que pasa, que la gente está sumergida en una gran mentira, que parece que el conflicto, que el "atentado", haya surgido de la nada. Y de la nada, como el propio nombre indica no surge nada.
La batalla, las barricadas, no solo están cuando las enfoca una cámara, eso solo lo hacen los políticos, que cuando ven una, son hermanas de la caridad, menos mal que existen los micrófonos. Benditos micrófonos que tantas veces han dejado en calzones a más de uno. Como iba diciendo, en la guerra no es lo mismo, no hay interrupciones, y es que ya lo dije meses atrás, importaba más el mundial que lo que sucedía entre Ucrania y Rusia, eso no tenía la misma gracia. No era tan cool.
Ahora que ya se ha acabado sí, ahora vuelve el enfrentamiento, lo que estaba puesto en pausa ha resurgido de nuevo con más fuerza, y no me refiero a la guerra, sino al interés mediático. La guerra nunca se interrumpió, aunque algunos piensen que sí.
Tal vez no nos parezcan suficientes 298 personas, pero si decimos 298 vidas ya suena algo más crudo, esto no es ciencia ficción, es la vida misma. Para bien y para mal. Mientras que en una cara del mundo vivimos en la absoluta tranquilidad inquietados por quien ha ganado el mundial, y el fracaso de España en una competición deportiva, entre antiguos componentes de la Unión Soviética usan técnicas dignas de la Guerra que tuvo lugar hace un siglo. Derribar aviones, manipular cuerpos sin vida, destruir pruebas decisivas de una investigación en "un país desarrollado", en fin, lo que viene siendo el principio de la "tercera Guerra Mundial".
El efecto inmediato ha comenzado, las consecuencias, y las polémicas ya están servidas, las compañías aéreas deciden evitar el cielo ucraniano, pero mientras que los medios no digan nada, aquí no ha pasado nada. ¡Viva la era de la comunicación! Viva ellos ¿Quiénes? Los todopoderosos, que igual te informan de todo que no te informan de nada.
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