Las noticias desde la perspectiva de un joven del siglo XXI

martes, 4 de febrero de 2014

MONARQUICO PERO NO TONTO

 El  colmo de  los  colmos  de  tratos  de  favor  es  lo que  está  sucediendo  con la  infanta  Cristina.  ¿Qué le pasa? Nada, ese  el problema,  que  no  le  pasa  nada. La  infanta está como una  ameba, callada, cobrando millones  y  sin hacer  prácticamente  nada, nada  de  provecho. Porque ya antes  ha  hecho de  las  suyas.
No sé si  soy  el único  que  ve esto,  pero es  que  cada  vez  más   el pueblo pinta  menos.  Con  mayor  frecuencia  hacen más  el paripe para que creamos  que  si  que hay justicia, que  realmente  estamos  siendo  gobernados  y  no sodomizados. Para  los  que  aún  no  lo  sepan con certeza,  ni dedujeran algo tras  las  palabras  del presidente  del País  de España,  Mariano Rajoy,  La  infanta  Cristina  no  pisará  la  cárcel.  Con  suerte  pisa  los  juzgados,  y  digo con suerte  porque  ya empiezan los  dimes  y diretes  de  que Doña  Cristina  no  hará  el paseíllo como  todo  hijo de  vecino,  y  es  que  tienen  razón ella no es  hijo  de un ser  normal,  es hija  de su Majestad  el Rey, que  pese  a  estar demacrado y  últimamente  resguardado de  imagen publica  sigue siendo  dirigente  de  la monarquía. No estoy de  acuerdo, porque  si dijera  lo contrario  mentiría, que  esa señorona  deba  bajar  en coche ¿por qué?  ¿Por  seguridad? Que  lo hubiera  pensado  antes  de  robar.

Me  molesta  mucho, y cuando digo MUCHO  es  mucho, que   defiendan  a pies  juntitas  a  la  infanta  mientras  que  a  Iñaki  lo  apedrean en  la  plaza  del pueblo, está claro que  los  dos  tienen  mucho que ver  en la trama  NOOS, a  las  pruebas  me remito. Uno ya  ha declarado y la  otra  está apunto de  hacerlo, y no será por  lo fácil que  lo han puesto. Sea  como sea pies  no le  faltan para  bajar   hasta  bajo, es  más  hasta  a  quienes  les  falta si  no es  hijo de  baja  arrastrando  por  los  suelos, ya  puede  estar  bajo presiones, amenazado de  bomba, que  baja  como si tal cosa.  Ahora  bien,  si  tu apellido   es  Borbón  las cosas  cambian,  cambian radicalmente,  giro  de  400  grados.

Sea como sea da  igual,  ya  no es  cosa  de  ser  monárquico, republicano  o  Judío converso, eso  es  lo de  menos,  se  trata  de  no ser  tonto,  y  yo por  lo menos  no  me  considero  eso. Ese  es  el problema,  que  nos tratan de  lo que  no somos, porque  es  verdad,  la infanta  goza  de  un trato de  favor  que  perdió el día  que  comenzó a  hacer  cosas  que  rozan la  ilegalidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario