Creo, pero no con total certeza, que Dani Rovira, Genio y figura donde los haya, hablaba en un monologo de la dura vida como hijo. No suelo hablar de cosas personales, empecé diciendo en mi primera entrada que: "esto no será un diario, un diario de esos bochornosos que empiezan siempre de la misma forma... y pese a que seguramente mi vida interesé más, porque divertida es un rato, más que mi opinión sobre temas de actualidad, voy a probar con la segunda." Ahora, no, ahora voy a contaros un extraño suceso, que como a muchos les pasa cuando ven a Esperanza Gracia, me inquieta, me atormenta y desde luego me perturba.
Empezaba diciendo que Dani Rovira en uno de sus muchos monólogos hablaba sobre la relación de Madres e hijos (y si me lo permitís, Madre siempre en mayúscula, ¿por qué? porque yo lo valgo. Si Rey o Dios se escribe con letra grande, ¿por qué una figura tan importante como es la Madre no?) A lo que iba, que me voy por las ramas, que un hijo nunca encontraba nada, y la Madre: "como vaya y lo encuentre...", como no, lo encontraba.
Esto es algo como busca y hallarás, pero hay veces que ni buscando se encuentran las cosas. Y a mi, hoy, me ha pasado eso. Bueno realmente lleva varios días, casi una semana sucediéndome eso.
La cosa es que yo guardo, y no me avergüenza decirlo, mi ropa interior en mi primer cajón, toda apilada. Los calcetines a la izquierda, a la derecha los calzoncillos y en paralelo un calzador de "Mickey Mouse". Todo normal, y yo, debo ser raro, pero una vez lo uso, aunque sea una vez lo tiro a lavar. Últimamente, y pese a que la lavadora esté en continuo movimiento veía que no tenía calzoncillos, que el montón de más de veinte, pasaba a tener menos de diez, y así, poco a poco, lentamente, ha disminuido hasta hoy. Hoy, para información de todos, llevo un bañador ajustado, porque calzoncillos ya no hay. Han desaparecidos.
Para desgracia de Dani Rovira, genio y figura donde los haya, mis calzoncillos "no se han asustado" y no han salido cuando mi Madre ha buscado, rebuscado y vuelto a buscar, pero que nada que no hay calzoncillos. Me he quedado sin.
Lo misterioso es que yo no me los he comido, no los he escondido, ni los he regalado por obra y arte de Dios. Tampoco soy sonámbulo, así que esa opción queda descartada, también la idea de que Mario Vaquerizo me los haya robado para que su amigo David Delfín le cosa una nueva chaqueta. Y sea como sea me he quedado sin calzoncillos, sin los Hilfiger, sin los del H&M... sin ninguno, solo se han salvado dos. Y la pregunta es ¿dónde están? ¿quién se los ha llevado? Mi intención si no aparecen es llamar a Cuarto Milenio, porque realmente no es moco de pavo, son unos calzoncillos robados. Un hurto en toda su esencia.
PD: Si alguien los tiene, o sabe algo sobre ellos que me lo haga saber a través de un comentario o un email, hotmail, gmail, imail... y todo lo acabo en mail.
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